Graciela nació en una familia de artistas. De ahí, que fuera natural en ella, desde muy temprana edad, su interés por diversas expresiones culturales. Si bien ejerce la profesión de psicóloga, ella prefiere reconocerse como una “recicladora”. Otorgando a este término un sentido amplio, que se manifiesta claramente en sus obras, en donde aquello que podría considerarse obsoleto, cobra nueva vida. Ha venido exponiendo sus trabajos desde 1992, en salas oficiales, museos y espacios alternativos. También puede encontrarse su obra en colecciones privadas, en Estados Unidos, Francia y Alemania. Sus viajes por el mundo le han permitido enriquecerse con lo esencial de las corrientes de vanguardia. En sus trabajos utiliza técnicas mixtas, en las que engarza materiales aparentemente dispares, pero que terminan encontrando un nuevo sentido, abierto a diferentes lecturas e interpretaciones. Por eso gusta llamarlos “Objetos poéticos”.

Graciela was born in a family of painters, artists who handed on to her the pleasure for different cultural expressions. Although being a psychologist practising this discipline she considers herself to be a recoverer, that is to say, a recycler, as in many artistic areas she gives birth to new cycles and a new life to that which seemed to be obsolete. She goes along these lanes enthusiatically and since 1992 she has been exhibiting her works in many official halls, museums and alternative spaces. Some of her works can be found in private collections in the United States of America, France and Germany. Through her journeys all over the world she has been able to show her art. In her work she uses mixed techniques linking apparently different materials, threading them as if they were poetical objects.

REFLEXIONES

Me ilusiona la idea de darle vida a aquello que parece perdido, obsoleto, olvidado. Bucear, jugar con las posibilidades que me ofrecen la gente y sus producciones.
Me decidí por dos caminos de los muchos que se me habían aparecido y para los que mis padres me habían estimulado. Me licencié en psicología, y me dispuse así a investigar primero en mí misma y luego en aquellas personas que me habían ofrecido sus historias, sus vicisitudes y sus conflictos. Es decir, todo aquello escondido que retenían con pesar. Tanto mis consultantes como yo, su psicóloga, nos sumergíamos en lo que iba apareciendo y buscábamos cómo iniciar nuevos ciclos para ir disolviendo esa densidad que obstruye la vida. Con mi ojo atento a cada expresión y mi oído a los cambios de voz, casi ensoñando, recorríamos diferentes caminos y nuevas preguntas. Encontrábamos otras puertas para abrir; deshilvanábamos y volvíamos a hilvanar. Pero ¿qué despierta mi interés en el relato del otro? ¿Por qué, sin proponérmelo, me tintinea algo en el discurso del otro? Creo que resuenan en mí las experiencias transitadas y los aprendizajes vividos.
El otro camino que elegí fue el de crear elementos, a los que llamo Objetos poéticos. ¿Cómo los elijo? ¿Por qué llaman mi atención? Escojo lo que percibo. Esto puede direccionarme a otro lugar, a aquello que acepta ser transformado, y que no se niega a reinsertarse en otro contexto ni a cambiar su significado. En fin, que no rechaza adquirir otra identidad, dar una vuelta vital. Así, entre soldaduras, vidrios rotos, martillazos, tuercas, poemas, música, alambres, encuentros y sorpresas, se va generando un nuevo objeto. Eso me da mucho placer, y quiero compartirlo.



I deeply enjoy the idea of bringing to life that which seems to be lost, obsolete, forgotten. To dive into and play with the posssibilities offered by people and their production.
Among the very many roads that appeared in front of me and for those I had been stimulated by my parents, I decided to take two. I graduated in Psychology and started investigating deeply in my own soul and thereafter in those persons who had offered me their own stories, difficulties and conflicts. Everything that was hidden, a sadly retained burden. Both my consultants and me, their psychologist, immersed ourselves into what was naturally coming out and then tried to look for the manner in which new cycles could be started so as to dissolve that kind of density that blocks life. With my eye on the alert to every single expression and my ear to any change in their voices, practically dreaming, we used to go along different roads and new questions. Thus we were able to find other doors ready to be opened; we untacked and tacked again. But, why do I become interested in what the other can say? Why is it, that without any personal purpose, there is something in the other’s discourse that tinkles inside me ? I believe that it is because the experiences lived and the learning acquired resound in my soul.
The other road I chose was to create elements which I call “Poetic Objects”. How do I choose them? Why is my attention attracted by them? I choose what I perceive. This can lead me to another place, to that which accepts to be transformed and to one that neither refuses to be reinserted in another context nor to change its significance. In fact, something that does not refuse to acquire a new identity, to take a vital turn. In this manner, among some welding, broken pieces of glass, hammering, nuts, poems, music, pieces of wire, meetings and surprises a new object is gradually created. I deeply enjoy it and I would like to share it with you.


Graciela Zuik